La Asociación General de Conservadores de Colecciones Públicas de Francia ha lanzado a la prensa francesa un manifiesto por el cual expresan su desacuerdo ante los recortes que se han llevado a cabo en la mayoría de museos y centros de arte del país, así como de la progresiva privatización de las estrategias museísticas que, según Christophe Vital presidente de esta asociación, están convirtiendo a las instituciones artísticas públicas en pequeñas empresas privadas más que en centros de cultura. Este manifiesto expresa también su desconsuelo ante la falta de especialización de los profesionales que últimamente ocupan ciertos cargos en los museos ya que cada vez es más frecuente, en la geografía cultural francesa, encontrarse con burócratas, políticos y abogados que con historiadores del arte. Esta es la primera vez que un colectivo como el de los conservadores, por lo general discreto y poco familiarizado con cuestiones mediáticas, toma la palabra para expresar un malestar que consideran pueden llevar al cierre de muchas instituciones públicas.