Más de 50 artistas nacionales e internacionales forman parte de PUNK. Sus rastros en el arte contemporáneo, una exposición colectiva comisariada por David G. Torres. Los rastros del punk se pueden seguir, como aquí se nos muestra, hasta el arte actual, así como el eco de la importancia que su presencia como actitud y como referencia tiene en muchos creadores. El movimiento, que surge entre 1976 y 1978 en Londres y Nueva York, es una explosión que alcanza a grupos de música, fanzines, a la moda y al arte; especialmente a todos aquellos que mostraban oposición frente a los convencionalismos de la industria musical, de la moda y del panorama socio-político. El punk surgió como reacción a la crisis del sueño hippie pero también con el auge del conservadurismo y la era Tatcher y Reagan, y su rápida internacionalización favoreció características nacionales en cada país.

En esta exposición el punk se organiza en distintas áreas temáticas, entre las que se incluyen el ruido, la negación, la violencia, la destrucción, la alienación, la anarquía, el nihilismo y la sexualidad. Entre los artistas, destacan Carlos Aires, Jean-Michel Basquiat, Chris Burden, Tracey Emin, Nan Goldin, Eulàlia Grau, Guerrilla Girls, VALIE EXPORT, Itziar Okariz y Joan Morey, entre otros muchos. Una exposición amplia, que ocupa varios espacios del centro madrileño, y que hasta octubre presenta un verano de arte y punk. (PUNK. Sus rastros en el arte contemporáneo, CA2M, Centro de Arte Dos de Mayo, Madrid. Del 26 de marzo al 4 de octubre de 2015).


Imagen: Chris Burden. 747, 1973.


Imagen boletín: Antoni Hervàs. Figues Febles [Higos débiles], 2014.