La VII Bienal de Berlín acaba de hacer públicos los nombres de sus nuevos comisarios asociados. Los elegidos han sido la curadora polaca Joanna Warsza y el polémico colectivo ruso Voina. Warsza es la directora de la Laura Palmer Foundation y ha realizado exposiciones en prestigiosos museos como el Pompidou o el Museo de Arte Contemporáneo de Varsovia. Voina es un grupo de acción artística iniciado en 2005 por Oleg Vorotnikov, Natalya Sokol, Leonid Nikolajew y Kasper Nienagliadny Sokol, conocido internacionalmente por su humor crítico y político con acciones como besar a los guardias del metro o lanzar gatos a los trabajadores de McDonalds. Sin duda alguna esta combinación de comisarios resultará explosiva.